Haz que tu boda sea única con un cuadro pintado por tus invitados
Si estás organizando tu boda y quieres que sea algo más que el típico «sí, quiero», aquí tienes una idea que hará que todo el mundo la recuerde. En lugar del clásico libro de firmas que acabará cogiendo polvo en un cajón, haz que tus invitados pinten un cuadro que colgaréis en casa para siempre.
Cero postureo, cero formalidades, solo buen rollo y creatividad compartida.
Y lo mejor: vosotros decidís cómo hacerlo. Puede ser un cuadro libre donde cada uno pinta lo que quiera, o algo más especial, como una obra colectiva con un diseño marcado de antemano. Nosotros nos encargamos de que el resultado sea digno de colgar en vuestra pared (y no de esconder en el trastero).
Un recuerdo de boda que no acabará olvidado en un cajón
Seamos sinceros. En las bodas hay muchos recuerdos que terminan desapareciendo. El ramo lo acaba cogiendo alguien que ni siquiera quería casarse, los regalos acaban en un armario y las fotos… bueno, tardan en llegar.
Pero este cuadro no. Este se queda con vosotros, a la vista, como un recuerdo real de vuestra boda. Y no solo eso, sino que cada vez que lo miréis, os acordaréis de ese primo que no sabía pintar, pero lo intentó, del amigo que se tomó demasiado en serio su papel de artista y de la tía que firmó tan grande que casi se lleva la mitad del lienzo… ¡Es broma! (o no…).
Lo que sí es verdad, es que esto es un recuerdo muy bonito de todos los asistentes a vuestra boda convertido en arte.

¿Cómo funciona?
- Se coloca el lienzo en una zona accesible para que la gente pinte a su ritmo, sin prisas ni presiones.
- Hay un profesional de Xpresarte dirigiendo la obra (porque si no, sabemos que alguien acabaría pintando su nombre en grande y poco más).
- Todo es personalizable: colores, estilo, tamaño… incluso podemos marcar un diseño previo si no queréis que la creatividad se descontrole demasiado.
- Cada invitado aporta su toque personal, ya sea con un pincel o firmando en una esquina de forma discreta.
Y al final de la boda, os lo lleváis listo para colgar.
Un plan que entretiene a los invitados y que además queda bonito
Todos hemos estado en bodas donde hay momentos muertos. Esos ratos en los que no sabes muy bien qué hacer, en los que la gente se dedica a mirar el móvil o a buscar la barra libre.
Con esta idea, los invitados tienen algo divertido que hacer y, sin darse cuenta, están creando un recuerdo que os quedará para siempre.
Mira cómo quedó en una boda real
Si os cuesta imaginar cómo puede ser el resultado, mirad este vídeo de una de las bodas donde hemos hecho esta experiencia:
Personaliza el cuadro como quieras
Aquí no hay reglas. El cuadro puede ser:
- Un lienzo libre, donde cada uno pinta lo que le apetezca.
- Un diseño guiado, con una base marcada para que los invitados completen (La opción que más triunfa siempre).
- Con mensajes ocultos, porque siempre hay alguien que quiere dejar un «recadito» entre los trazos.
- En la gama de colores que queráis, para que encaje con la decoración de la boda.
Una idea que funciona muy bien es que los novios den la última pincelada juntos, como símbolo de su nueva etapa. Así que si os gusta la idea de unir el arte y el amor, este es el momento.

Cómo reservar esta experiencia para tu boda
Si os gusta la idea y queréis incluirla en vuestro gran día, es muy fácil:
- Contactad con nosotros y os explicamos todo.
- Reservad la fecha y decidid cómo queréis personalizarlo.
- Nosotros nos encargamos de todo, vosotros solo disfrutad del día.
Haced que sea especial y que os deje un recuerdo de verdad.